Profilaxis antibiótica en el hospital San Eloy, todo un éxito

La profilaxis antibiótica tiene una eficacia destacada en la prevención de las infecciones de lugar quirúrgico ILQ y sigue siendo la principal medida de prevención de las ILQ, así como la más costo-efectiva (1). Es recomendada por todas las guías de práctica clínica actuales y es ampliamente aplicada por todos los hospitales que disponen de buenos protocolos.

Nivel GRADE de evidencia I: para la mayoría de las localizaciones quirúrgicas, salvo en las intervenciones de cirugía limpia, cirugía sin implantes y sin otros factores de riesgo, donde su eficacia no está demostrada de modo concluyente.

Mecanismo de actuación: eliminación, por acción del antibiótico, de los microorganismos que contaminan el lecho operatorio o que difunden a la sangre. Va encaminada a los microorganismos patógenos o contaminantes más habituales de cada localización quirúrgica y solo ejerce su actividad durante la intervención quirúrgica o pocas horas después de su administración (2-9).

Puntos críticos: son los relacionados con una buena elección del antibiótico, con el inicio, la duración y con un buen ajuste a peso, grado de obesidad, perfil de solubilidad (antibióticos liposolubles o hidrosolubles hemodilución y función renal) (2-9).  

Este protocolo se inició a finales de 2019 con la creación de un grupo de trabajo impulsado por el Servicio de Farmacia y Sección de Enfermedades Infecciosas con los objetivos de revisar las indicaciones, pactar las profilaxis con los servicios y elaborar los protocolos en el sistema de prescripción electrónica. También se definió la duración de la profilaxis en la prescripción electrónica con stop automático y se protocolizó la duración de la profilaxis basada en el grado de contaminación de la cirugía.

Se especificaron los tiempos de administración en el antes y el después de entrar a quirófano, y ya en intraquirofano con el inicio de la inducción de la anestesia. Se mide el tiempo quirúrgico para valorar la indicación de la segunda dosis de profilaxis basándonos en la vida media del fármaco, en ese momento el anestesista avisa cuando es el momento adecuado.

Todo este trabajo comenzó con la participación de un referente de cada servicio quirúrgico que se encargaba de consensuar la profilaxis con su equipo, acuerdos que luego se revisaron con el grupo de trabajo para el protocolo final. También se elaboró un protocolo de profilaxis para alérgicos a los fármacos de primera elección.

Con el apoyo de la dirección, que comunicaba continuamente a los servicios la responsabilidad de la correcta prescripción de la profilaxis antibiótica, concierne al médico del Servicio Quirúrgico que interviene al paciente prescribir electrónicamente el protocolo de profilaxis adecuado previo a la intervención para que el día de la IQ, cuando el paciente acceda a la URPA, el personal de enfermería disponga de la prescripción adecuada y pueda proceder a su administración y registro sin demoras ni obstrucciones al funcionamiento normal de la Unidad.

Nuestra OSI se encuentra entre las mejores en el indicador de cumplimiento de la profilaxis antibiótica a las 24 horas.

Esta medida en apariencia sencilla que en un principio conlleva la prescripción de un fármaco en un protocolo prequirúrgico necesita de seguimiento y evaluación, además de la monitorización de su cumplimiento, incidiendo en variables clave, además de los puntos críticos para asegurar su efectividad en el control de las infecciones, como son la indicación, el tipo de fármaco, la dosis, el momento de comienzo y los días de duración. Cada una de estas variables requiere un seguimiento y para ello utilizamos la herramienta de prescripción hospitalaria de nuestra historia clínica electrónica.

Rememorando los últimos cinco años de seguimiento y evaluación de las profilaxis antibióticas en las cirugías seleccionadas:

Cirugía de prótesis de cadera (años de estudio desde el 2019 al 2024): desde nuestro programa de vigilancia de nuestro hospital INOZ hemos recogido 14 infecciones de sitio quirúrgico en un total de 824 pacientes. Con incidencia acumulada (IA) de infecciones de localización quirúrgica profunda y de órgano-espacio de 1,82%. Con una indicación de profilaxis del 98% y administradas 97,57%, el porcentaje restante ya tenía tratamiento antibiótico.

Cirugía de prótesis de rodilla (años de estudio desde el 2019 al 2024): hemos recogido 14 infecciones de sitio quirúrgico en un total de 815 pacientes. Con incidencia acumulada (IA) de infecciones de localización quirúrgica profunda y de órgano-espacio de 0,98%. Con una indicación de profilaxis del 97,78% y administradas 99,39%, el porcentaje restante ya tenía tratamiento antibiótico.

Cirugía de colon (años de estudio desde el 2019 al 2024): hemos recogido 19 infecciones de sitio quirúrgico en un total de 236 pacientes. Con incidencia acumulada (IA) de infecciones de localización quirúrgica profunda y de órgano-espacio de 5,93%. Con una indicación de profilaxis del 98,69% y administradas 97,03%, el porcentaje restante ya tenía tratamiento antibiótico.

El éxito del cumplimiento de la profilaxis, que en nuestro medio alcanza porcentajes superiores al 98%, con las excepciones de situaciones en que el paciente ya recibía terapia antibiótica, supone un éxito del cumplimiento y en resultados, gracias al trabajo conjunto del personal médico y de enfermería en las unidades correspondientes a la preparación prequirúrgica. Siempre tiene un amplio margen de mejora en situaciones concretas que, en nuestro caso, gracias al trabajo continuo, hemos alcanzado a un nivel de aplicación óptimo.

Referencias

    1. Proyecto Infección quirúrgica Zero. Protocolo del Proyecto. Fecha de revisión 3 de noviembre de 2016. Disponible en: https://seguridaddelpaciente.sanidad.gob.es/practicasSeguras/seguridadBloqueQuirurgico/docs/Protocolo-Proyecto-IQZ.pdf (02/04/2025)
    2. Condom RE, Schulte WJ, Malangoni MA, Anderson MJ. Effectiveness of a surgical wound infection surveillance program. Arch Surg 1983; 118(3): 303-7.
    3. Burke JP. Maximizing appropriate antibiotic prophylaxis for surgical patients: An update from LDS Hospital, Salt Lake City. Clin Infect Dis 2001;33(Suppl 2):S78- S83.
    4. Anderson DJ, Kaye KS, Classen D, Arias KM, Podgorny K, Burstin H. et al. Strategies to Prevent Surgical Site Infections in Acute Care Hospitals. Infect Control Hosp Epidemiol 2008; 29:S51–S61. 46.
    5. Mangram AJ, Horan T, Pearson ML, Silver LC, Jarvis WR and The Hospital Infection Control Practices Advisory Committee. Guideline for prevention of surgical site infection. Infect Control Hosp Epidemiol 1999; 20(4): 247-78. 47.
    6. Alexander JW, Solomkim JS, Edwards MJ. Updated recommendations for control of surgical site infections. Annals of Surgery 2011; 253(6): 1082-93.
    7. Anderson DJ, Podgorny K, Berríos-Torres SI, Bratzler DW, Dellinger EP, Greene L et al. Strategies to prevent surgical site infections in acute care hospitals: 2014 Update. Infect Control Hosp Epidemiol 2014;35(6):605-26.
    8. Asensio A. Infección de localización quirúrgica. Profilaxis antimicrobiana en cirugía. Enf Infec Microbiol Clin 2014;32(1):48-53.
    9. Crader MF, Varacallo MA. Preoperative Antibiotic Prophylaxis. [Actualizado el 4 de agosto de 2023]. En: StatPearls [Internet]. Treasure Island (FL): StatPearls Publishing; Enero de 2025. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK442032/

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